En el gran vacío que Soy, me sumergiré. Me dejaré caer en el abismo de redención, donde sólo, con mi Ser, me iluminaré con esa luz inexistente que todo me revela.
El vacío será lo único que me llene de instante en instante, mi único sostén y mi único aliado.
El vacío que soy, es mi único Maestro; el único que conoce mi senda, mi camino, mi sendero.
Senda iluminada por el silencio de mi sabiduría, camino iluminado por la nada en la cual existe todo, y sendero iluminado por la soledad acompañada de todo.
Solo gratitud siento al re encontrarme.
Gracias amados, gracias agresores, gracias cielos, gracias infiernos: en la cruz que formáis, Yo Soy El Centro.